Últimamente he estado apartado de mis labores como administrador único de este blog. Otros quehaceres como salvar al mundo de amenazas varias, mi negocio de castración de infieles a domicilio, dirigir la misión a Marte de la Nasa,... me tenían apartado de las laboriosas pero no menos gratificantes artes de actualización.
Esta entrada es gracias a la fantástica creación del Sr. Allegue (más bien a su saque comiendo atún), y a esa vocecilla que resuena a todas horas en mi cabeza canturreando "Mátalos a todos Max, quieren alimentarse de tu suculento cerebro".
Decidí que por la integridad física de mis allegados y fieras domésticas, tendría que mantenerme ocupado en mi retiro de hermitaño. Fruto de horas de trabajo en mi laboratorio y después de varios sacrificios y partos dolorosos, la luz emergió al final del túnel.
Con todos ustedes mi hija número 5:
Y la número seis (de tres cuerdas por ser número bíblico):
Faltan las fotos de la número cuatro, un híbrido entre caja de puros y lata de espárragos tamaño King Size, ya que fue a parar a manos de mi amigo y coleccionista de arte y trebellos D. Manuel Xosé Naveira.
En breves subiré vídeos demostrativos para remarcar este sonado triunfo. Yeehaaaa!!